El Gobierno debe garantizar la distribución de alimentos en las escuelas para toda la matrícula, con personal especializado y medidas de prevención.
Entre la medianoche del 27 y la mañana del sábado 28 de marzo, fue enviada a los correos de las Supervisiones y escuelas de la CABA, la Comunicación N°101 en la que se da cuenta del funcionamiento del servicio alimentario ante la probable extensión del plazo de las medidas de aislamiento social preventivo y obligatorio.
Desde Ademys, expresamos los diversos motivos por los que entendemos se debe rechazar dicha comunicación:
• En primer lugar, porque la normativa indica que la canasta alimentaria está destinada sólo a aquellos que hayan gestionado o estén gestionando la beca alimentaria. Desde hace un año, es el gobierno y no la escuela, el que inscribe y las aprueba vía on- line, con un trámite engorrroso que tiene por finalidad reducir la cantidad de raciones en base a la dificultad para acceder al mismo. Frente a la crítica situación que se vive y que pone a muchas familias de nuestras comunidades ante la imposibilidad de salir a ganarse el sustento, no es la docencia la que deba responder poniendo el cuerpo y la cara, diciendo quién recibe alimentos y quién no.
• En segundo lugar, porque el servicio de comedor escolar fue concesionado a empresas privadas. La docencia no tiene injerencia ni sobre la calidad ni la cantidad de alimentos que se sirven ni se encarga de asignarlos. Por lo tanto, la norma no puede imponer a los docentes una obligación que es propia de los concesionarios y por la que les abona importantes sumas de dinero.
• En tercer lugar, porque la comunicación oficial menciona una serie de resoluciones y omite otras que contradicen lo que allí se expresa. Las guardias funcionaron hasta que se decretó el aislamiento obligatorio. Al punto que, fueron solicitadas a las conducciones, las llaves de todos los establecimientos, con las actas correspondientes, para encargarse de la distribución alimentaria.
• Además, esta comunicación se difundió sin respetar la vía jerárquica que rige la comunicación dentro del sistema educativo y recién HOY DOMINGO, es la Dirección del Área la que baja la comunicación al resto de las instancias, solicitando la respuesta en el mismo día. Sin comunicar cuál sería el protocolo de funcionamiento ni los insumos de protección con los que se contará.
• Por último, y no por ello menos importante, porque es una tarea ineludible del Estado encargarse de asistir a la población ante la emergencia sanitaria y alimentaria que esta situación genera, dentro de la cual nos encontramos, también lxs docentes. Nuestra labor primordial es la pedagógica. A ella nos hemos abocado, apelando a los más variados y creativos métodos para llevar a la inmensa mayoría de nuestrxs chicxs los mejores recursos que permitan dar continuidad al trabajo que veníamos desarrollando. Que cada quien se haga cargo de la tarea que le corresponde: al gobierno de la CABA le corresponde garantizar el derecho a la alimentación y a la salud de sus ciudadanxs. Nuestra espalda la ponemos para garantizar el derecho a la educación. La declaración de la educación como un servicio esencial es un intento de avanzar sobre nuestros derechos laborales.
Llamamos a supervisiones, conducciones y docentes a organizarnos para:
- denunciar el desconocimiento que tiene el gobierno de nuestro trabajo,
- reclamar bolsones de alimentos dignos para todas las familias de nuestras escuelas
- exigir medidas y kits de protección para todes les trabajadores que tengan que exponer sus vidas para ayudar a paliar el hambre que los sucesivos gobiernos fueron dejando en nuestra población.
