Ante una nueva ofensiva del gobierno que pretende instalar cámaras en las escuelas alertamos a la comunidad educativa y convocamos a organizar acciones para rechazarlo.
Promovamos asambleas de escuelas y con las familias y estudiantes, elevemos cartas de rechazo y pensemos acciones de repudio.
La instalación de cámaras en las escuelas viola el derecho a la intimidad de las infancias y adolescencias y es un intento de control sobre la docencia.
Para el resguardo de materiales didácticos e informáticos pueden realizarse otras acciones.
¡No a las cámaras en las escuelas!
A todas las comunidades, volvemos a reiterar que nos ponemos a disposición para acompañarlas legal y sindicalmente.