Por la continuidad del plan de lucha, sin semanas de tregua, hasta ganar
El gobierno de Rodríguez Larreta y la ministra Acuña pretenden, una vez más, ajustar el salario y el presupuesto para educación. El acta salarial aceptada por algunos sindicatos es la expresión de ese ajuste ya que consolida una pérdida superior al 10% en 2018 y prepara las condiciones para una rebaja salarial en 2019. El gobierno tampoco ha dado respuestas a ninguna de las demandas de la comunidad educativa que se han expresado en todo este período. Están en juego nuestras condiciones salariales y laborales, así como está en riesgo la educación pública.
Ante este escenario, llevamos a cabo un paro de no inicio los días 6 y 7 de marzo y el 8M en el marco del paro internacional de mujeres que tuvieron un acatamiento importante. El reclamo inocultable de la docencia es el plan de lucha con continuidad, sin semanas de tregua, hasta ganar en el reclamo salarial y en el resto de las demandas, así como lograr frenar la política de descuentos de los días de paro que coartan el derecho a huelga.
Las experiencias recientes de conflictos docentes victoriosos, como los de Neuquén y Chubut, marcan un camino: asambleas únicas de la docencia, paros que se van revalidando y extendiendo semana a semana, movilizaciones y múltiples acciones de difusión y solidaridad de la lucha docente. Solo así se ha logrado revertir parcialmente el nivel de ajuste a la docencia y se han derrotado los descuentos por paros.
Las medidas de fuerza a cuentagotas, quincenales o mensuales, no sirven para desenvolver la tendencia a la lucha que anida en un gremio que viene siendo golpeado pero que no ha sido derrotado por el gobierno nacional, por los gobernadores o el jefe de gobierno porteño. Las reservas de lucha de la docencia y la comunidad educativa se expresan en el triunfo parcial contra el cierre de escuelas nocturnas, contra el traslado de la Escuela de Cerámica 1 o por la sala del maternal del Hospital Ramos Mejía.
Por todo esto, les proponemos darle continuidad al plan de lucha, sumándose a la marcha de antorchas que estamos convocando para el lunes 11, y a impulsar juntos una sola instancia de deliberación en una asamblea única abierta a toda la docencia de la ciudad para votar el plan de lucha unitario que necesitamos con paros y movilizaciones.
