Jornada Extendida funciona en escuelas públicas de CABA, primarias y secundarias, a contraturno. Es imposible, dadas las condiciones edilicias de las escuela públicas, no estar peligrosamente cerca de los grados de la mañana o de la tarde. Que Jornada Extendida esté funcionando con plena presencialidad rompe todos los protocolos. De por si, hay cruzamiento de burbujas entre los turnos, y ni hablar por los espacios disponibles, de como se cruzan también las burbujas entre los grados de Jornada Extendida misma.
A eso se agregan las condiciones de insuficiente distancia y ventilacion de los comedores donde se almuerza; además de hacer que los alumnos se tengan que atragantar comiendo el almuerzo rapidísimo para poder meter a todos los turnos de comedor. Es un desastre.
Sumado a esta situación de no cuidado ni prevención del contagio de Covid19, está que el programa arrancó con cero presupuesto: no hay materiales. Con suerte están los que sobraron, si es que sobró algo, del ciclo lectivo del 2019 (xq en el 2020 nunca llegó nada a las escuelas tampoco). Tampoco hay suficiente personal de auxiliares ni asistentes de comedor que garanticen la logística necesaria de servir la comida, limpiar y desinfectar los espacios usados para clase y almuerzo.
Con respecto al personal docente, el gobierno de CABA amparado en la condición contractual en negro a la que somete a los trabajadores de Jornada Extendida (sin derechos laborales y con un salario menor al resto de la docencia), durante este año ha despedido sin causa a decenas de maestros y maestras. Y por supuesto que ahora, que han a las apuradas abierto el programa, falta personal para cubrir todos los cargos necesarios.
A esto debemos sumar 3 nuevos despidos de trabajadores realizados en el dia de ayer.
La apertura del programa se hizo de manera caótica y desfinanciadamente, con el único objetivo de cumplir con el calendario electoral. Ni siquiera se respetó la continuidad pedagógica del trabajo docente anterior sino que se trasladó a docentes de escuela en escuela sin lógica del cambio.
Una vez más, Jornada Extendida es el ejemplo de cómo el gobierno de CABA precariza a los trabajadores y menosprecia a la educación pública.
Exigimos:
-Cumplimiento de las leyes laborales docentes y el ingreso de todos los trabajadores de Jornada Extendida al Estatuto Docente.
-Aumento de presupuesto a fin de cubrir las necesidades materiales de una educación de calidad y cantidad de personal en cantidad suficiente.
-Espacios edilicios que permitan los cuidados necesarios de distancia y ventilación para prevenir el contagio de Covid19; y acordes a un funcionamiento escolar.
Trabajadores de Jornada Extendida que no podemos poner nuestros nombres porque nos despiden por pensar distinto al gobierno.