Desde Ademys, repudiamos el intento del macrismo de cerrar el Programa Puentes Escolares en el barrio de la Boca, para abrirse en el Bajo Flores. Esta medida sin ningún criterio pedagógico no tiene ningún otro objetivo más que la necesidad política de la gestión de abrir vínculo con los curas vinculados al Papa Francisco que trabajan en esa zona.
Recordemos que el programa Puentes Escolares se dedica a revincular chicos y chicas que no asisten a escuelas públicas a través de distintos talleres y en equipo con varios profesionales. Mudar el programa de un barrio a otro implica abandonar el trabajo que se viene haciendo desde hace ya varios años y, en este caso, a 32 chicos que asisten regularmente.
Ya en abril de este año, Andrea Bruzos Bouchet, quien está a cargo de esta iniciativa, les comunicó al equipo de Puentes de la Boca que se tenían que trasladar a la Villa 21 a trabajar en el marco de los proyectos de los curas villeros. Ante la negativa de los curas a ser cómplices del cierre no se pudo “mudar” el programa.
Pero la gestión vuelve a exigir que se traslade con la gravedad que lo hace a través de un telegrama intimidatorio con consecuencias muy graves para los compañeros que se niegan a abandonar a sus alumnos.
Desde Ademys queremos expresar un fuerte repudio a esta medida arbitraria y persecutoria, de Soledad Acuña, subsecretaria de Equidad Educativa de la Ciudad. Así mismo, nos solidarizamos con los compañeros afectados y exigimos que no se cierre el programa Puentes Escolares en ningún barrio de la Ciudad de Buenos Aires.